Un grupo de la organización ambientalista había pasado la noche en embarcaciones neumáticas, oscilando entre la plataforma y el buque de pasajeros ‘Anna Ajmátova’ que transportaba a los trabajadores que concluirían los arreglos técnicos para iniciar los trabajos de perforación.
A las 5 am, tiempo de Rusia, los diez activistas de ocho países se pusieron en acción para interceptar el ‘Anna Ajmátova’ tratando de evitar que se colocara al lado de la Prirazlomnaya. Dos activistas de Finlandia y Alemania ataron su bote inflable a las amarras que unen a la plataforma con el buque de pasajeros pero no pudieron impedir el embarque de la tripulación. La lancha de Greenpeace fue prácticamente izada y los activistas fueron lanzados a las heladas aguas.
Hablando desde el Arctic Sunrise, Kumi Naidoo, Director Ejecutivo de Greenpeace Internacional declaró: “Estar aquí frente a esta plataforma gigante mientras el mundo se entera de que el hielo del mar Ártico ha alcanzado un mínimo histórico, es alucinante. Es inexplicable la arrogancia de las empresas que quieren explotar los recursos de esta región en un momento tan precario de nuestra historia”.
Para evitar poner en riesgo la integridad de los activistas, Greenpeace se alejó temporalmente de la zona. Ahora, el Arctic Sunrise planea navegar hasta el extremo norte con un equipo de científicos para documentar el deshielo récord que ha alcanzado la región este año.
Continuaremos nuestra campaña contra Gazprom, Shell y todas las otras empresas petroleras que planean ir al Ártico para continuar con sus planes de perforación, mismos que podrían derivar en una catástrofe ambiental sin precedentes.
Nuestra voluntad de preservar el Ártico para la Humanidad es tan fuerte como el más milenario iceberg.
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